2 Corintios 3:10 Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica. Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo. Y si sobre este fundamento alguno edificare oro, plata, piedras preciosas, madera, heno, hojarasca, la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada. 

Ver nuestras vidas como un “edificio espiritual” es una bonita imagen.  Veo desde este balcón edificios terminados y otros en construcción; el arquitecto colocó el fundamento y en la mañana llegan obreros a levantar pisos segun el diseño. Cada mañana en nuestra vida avanza el proceso de edificar “cada uno mire cómo sobreedifica”: madera, heno, piedras preciosas, hojarasca” …un día… nuestra construcción será pasada por fuego y el fuego revelara, nuestra realidad interior; avanzamos hacia ese día. Serán examinadas nuestras actitudes, intenciones y verdad. ¿Que quedara? ¿Que permanecerá? Solo lo que hayamos hecho con un corazón limpio para la gloria de Dios. Nunca es tarde para empezar de nuevo y edificar tu habitación; tu espíritu y tu alma eterna.  Hoy es un buen día para reflexionar y colocar oro, plata y piedras preciosas. ¿Donde encontrarlas? ¡En la Palabra! Alli los materiales son exquisitos y ya fueron pasados por fuego. Levantemos el testimonio cada día, nuestro edificio espiritual.   Revisemos, evaluemos, quitemos lo que afea o no sirve y digamos : examíname oh Dios, pruébame, conoce mi corazón y ve si hay en mi camino de perversidad; revélame la realidad de mi cristianismo y guíame a construir para la eternidad.  ¿Lo demás? Pasará. 

Ps. Fanny Gonzalez